Hoy prepararemos la comida en cuarenta minutos.
Hoy aun siendo una receta sencilla la pongo por si alguien no la conoce y en recuerdo a ELLA a mi Madre.
Mi madre salía del apuro al llegar tarde para hacer la comida, era una mujer que trabajaba fuera. Sí, la hortaliza que se criaba en la huerta ella la vendía en la plaza. Muy temprano, de noche, se levantaba e iba al mercado. Su delantal, y una gran sonrisa para su parroquianas. Los platos del peso de metal dorado relucían, ella los limpiaba todos los días al terminar la venta con el jugo de un tomate, ¡y cómo brillaban, cómo el oro! La buena tendera tenía que despachar "chorreao´" para que se fuese contenta la clientela fija, tenía que procurar venderlo todo ya que al día siguiente estaría todo marchito o con poca vista.
Con esto quiero contar que llegaba a casa casi justo para hacer la comida del medio día. En un santiamén preparaba unas patatas en adobillo. En mi casa siempre había media cámara llena de patatas, ya que vendíamos todo el año. Pues ni a la tienda tenía que ir. El aceite se tenía en cantaras para todo el año, nuestro riquísimo aceite bañusco, la comida lista…
Hoy aun siendo una receta sencilla la pongo por si alguien no la conoce y en recuerdo a ELLA a mi Madre.
Comenzamos a cocinar.
Pelamos las patatas y las freímos a lo pobre.
Siempre que digo Patatas a lo pobre viene a mi mente el recuerdo de un mujer que decía "Pues a mi Paco le gustan las patatas a lo pobre ¡pero de pobre nada que chupan mucho aceite…!" Pues ahí está el secreto, las patatas a fuego lento y con buen aceite "Aceites Milenarios"
Escurrimos el aceite dejamos un poquito para marear una cucharada de pimentón.
Ponemos agua hasta cubrir las patatas, colorante, cuatro ajos machacados con sal y orégano. Dejamos unos diez minutos hirviendo.
Acompañaremos las patatas con unas salchichas frescas. Freímos y después escurrimos un poco de aceite y ponemos una cerveza.
Dejamos que embeba sin dejar que se quede en el aceite, apartamos un poco antes.
Siempre que digo Patatas a lo pobre viene a mi mente el recuerdo de un mujer que decía "Pues a mi Paco le gustan las patatas a lo pobre ¡pero de pobre nada que chupan mucho aceite…!" Pues ahí está el secreto, las patatas a fuego lento y con buen aceite "Aceites Milenarios"
Escurrimos el aceite dejamos un poquito para marear una cucharada de pimentón.
Ponemos agua hasta cubrir las patatas, colorante, cuatro ajos machacados con sal y orégano. Dejamos unos diez minutos hirviendo.
Acompañaremos las patatas con unas salchichas frescas. Freímos y después escurrimos un poco de aceite y ponemos una cerveza.
Dejamos que embeba sin dejar que se quede en el aceite, apartamos un poco antes.
7 comentarios:
Que ricas, desde joven no las he comido.
Muy buenas comidas para salir de la crisis.
YO LAS LLAMO PATATAS AL AJILLO
Me recuerdan a mi niñez , como era mala comedora , me las hacía mi abuela , por que era lo que mejor comía y nunca teía pereza para hacermelas , muy bañuscas ellas
Saludos Ana
Me alegra verte Yenifer, un saluso. Espero que algún día cuando me veas me digas soy esa Yenifer...
Ya te lo diré un dia , no tengo ningún inconveniente ,aunque al no estar en el pueblo (otra vez entre comillas )es difícil coincidir , tu blog es de lo mejor
Muy buenas esas patatas pero de pobres nada yo diria a lo rrico por que ya quisiera mucha gente comerlas un saludo AMIGA ANA
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