BAÑOS DE LA ENCINA CANTÓ ESPERANDO EL NACIMIENTO DEL NIÑO DIOS
CORO PARROQUIAL
RONDALLA BAÑUSCA
Peña Flamenca "Antonio Laruta"
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Centro de Adutos Tamujoso
Asociación Cultural de Mujeres "La Llaná "
risto Crucificado y perdonó a los hombres que mataron a su esposo Ángel Romero durante la Guerra Civil española en Murcia
so. Sin embargo, así fue la vida de María Séiquer Gayá, una murciana que, tras sufrir la pérdida de su marido en un paseo de la Guerra Civil, se consagró a Dios y fundó la Congregación de las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado, desde la que cuidó a los artífices de su desgracia.
e su estancia en la cárcel, su esposa sólo pudo visitarle dos veces, para no ser víctima de las iras de los milicianos que campaban por las calles. La última de esas visitas fue en la víspera de su muerte. Aquel día, Ángel dijo a su esposa: «Creen que nos sacrifican, y no ven que nos glorifican. Nunca he estado tan cerca de Jesús como al ver que me tratan como a Él». Y ella, después de confortar junto a su marido a otros presos desesperados, le confesó: «Si no me matan a mí también, te prometo ingresar en el convento».
asesinos de sus maridos e hijos. María, sin embargo, optó por el camino del perdón: «Perdono a todos mis enemigos, te pido por ellos y avivo el deseo de perdonar a todos los que me hicieron mal», dejó escrito.