lunes, 19 de diciembre de 2011

Esto de la crisis je je je

5 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajaj que bueno niña jejejje

chachanica dijo...

CAIDO DEL CIELO
Voy a contar algo que me sucedió el otro día por la tarde.
Ya tenia todo el equipaje preparado para regresar a Madrid cuando me acordé que tenia que bajar a casa de mi madre a recoger algo, casi siempre me subo por el cotanillo pero esa tarde no se porque me decidí por la calle Mestanza, al pasar por la fuente de la calle Salsipuedes, vi un carrito de un Niño, miré a un lado y a otro y no vi a nadie, pensé que raro, y seguí mi camino, llegando a la altura del antiguo cuartel oí el llanto de un niño, angustiada volví por mis pasos pensando lo que no quería creer, llegue al cochecito miré y dentro había un BEBE, no sabia que hacer, el pobre estaba desnudito, no paraba de llorar, pensé, será de algún turista despistado que con el jaleo no se han dado cuenta y lo olvidaron, la solución, subirlo al cuartel ellos sabrán que hacer. El Niño seguia, y seguia llorando solo se calló cuando empezamos a subir, digo que con el movimiento se quedo dormido, ahora llegare a la Farmacia por si ellos saben algo.
Cuando subía la calle arriba al llegar a la altura de la casa de la Antonia la ventitresa, llegaba su hija, nos saludamos, pero me extraño el comentario que me hizo, dijo, mucho has cargado, seguí, pensando, no ve que es un niño, la Farmacia estaba cerrada, entonces al pasar por la cabina de teléfonos, alguien que no conocí me dijo, tarde vas con la compra, parpadee unas cuantas veces preguntándome, la gente esta mal de la cabeza, o seré yo, sigo el carril arriba comprobando que era un carrito con el Niño, llegue a la Iglesia con la esperanza de encontrar a los turistas, pero nada, todo estaba solo, no había nadie por la calle, es normal, pensé la gente esta en aceituna y vienen cansados y no tienen ganas de salir, de pronto recordé que el cuartel a esas horas esta cerrado.!pero que hago!,con las mismas puse rumbo al Molino de Viento, quizás estén allí…pero tampoco, bueno, voy a ir a la parada del autobús pues a veces los dejan ,voy por el barrio nuevo y aparcando un tractor esta un hombre y le pregunto si ha visto algún autobús, y dice, si lo vi, pero esta tarde saliendo del Pueblo, yo ya nerviosa no sabia que hacer, como estaba cerca de mi sobrina, me dije, se lo dejo a ella y mañana que lo lleve al cuartel.
Atravesando las calles fui a parar a una plaza, muy bonita, leí el cartel, solo me alcanzo la vista a leer no se qué de Baños, de pronto, un coche, por fin veo a alguien que me saluda, prima paseando al nieto, ¿ a estas horas ?, yo tenia entendido que no tienes, baya, estos ven lo mismo que yo, a medida que me acerco, los conozco son Antonio y Ana ( (los de Mis Propias Cosas ).
Les cuento el episodio y les pido por favor que se queden con Él, ella tan dispuesta a ayudar como siempre accede a quedárselo, pero dice, yo no tengo ropa para ponerle, tú piensa algo pero que tengo prisa, ya, espera, voy a llamar a mi amiga Isa y que ella al venir pida a alguien ropita para poderle poner. Como puedo, y ya mas tranquila, les doy las gracias por ayudarme y me marcho, ya se me ha hecho muy tarde y tengo que madrugar. Por la mañana antes de ir al autobús pasé por la ventana, y, uuuf, respiré tranquila, EL NIÑO ESTABA EN BUENAS MANOS

Ana Ortiz Rodríguez dijo...

Aquella noche Isa y yo muy nerviosas bañamos al pequeño y lo vestimos con ropa que ella bastante previsora tenía guardada para sus futuros nietos, podía parecer algo absurdo pero eran ropas tan bonitas que nuca quiso desprenderse de ellas. Era ya una hora avanzada y pesamos que era mejor esperar que llegase el día donde todo se ve más claro. Como una cena improvisada leche con unas cucharadas de Maicena parecía lo más oportuno. Cuando Isa se fue, prometiéndome volver al día siguiente con su coche para llevara al pequeño quedé tranquila algo estaba pasando y dentro de mi ocurría algo importante; Sólo bastaron unas horas ya parecía que era parte de la familia aquel niño de piel morena y negros ojos.
Todo en mi era confuso, que pasó, por qué le dejaron, dónde irá a parar esta criatura, ¿Y si le buscan? Tengo que llevarlo ¿Pero y si no le quiere nadie? Yo le cuidaría bien. Comencé a sentirme más joven mis huesos se hicieron silencio mientras deambulaba de un lado a otro preparándole otro tazón de gachas. El pequeño me miraba atónito con la boca abierta esperando. En ese momento sonó la alarmar- despertador del móvil; Sacudiendo la cabeza pensé ¿Estoy dormida, todo esto es un sueño??????? o estoy despierta!!!!

Anónimo dijo...

Que bonito cuento de NAVIDAD, en dos capitulos, dos escenarios, y que tierno, que amor, que afecto, que ganas de ayudar, que desprendidas las dos. Precioso.
Esa es la navidad para mi, amor a los demas siempre.

Encarna dijo...

Chacanica es precioso tu relato y más seguido con el otro de Ani, que sueño más bonito, ese niño estuvo en buenas manos.
Un abrazo para las dos. Me habéis hecho esbozar una sonrisa.
Ese niño nunca olvidará esas manos caritativas de su cuento de Navidad...