lunes, 26 de octubre de 2009

Allí no te encontré


Campo Santo, vigilante de nada, reposo, rompimiento, sin prisa, sin miedos... Tierra de sobras, de flores también muertas, rezo de ciprés al cielo. Días de visitas, de jabón absurdo ¿más pulcro no hay duelo?
Apesadumbrada piso el suelo "La Peñasca" así nombran el terreno. Repleto de nombres y fechas esculpidas en mármoles, dolor, desconsuelo, regado de lágrimas que no entienden por qué se fueron. Antepasados a los que sin conocer cavas la tierra ¡era el abuelo…! Me enseñaron a rezar por ellos y hacer esto: a pintar de negro, a limpiar la chapa dorada para leer de nuevo el nombre y al final D.E.P.

Triste llego a casa cuando muere el sol, recordé sus manos, su sombrero, pero no estaban, no había nadie, sólo sus restos. Al llegar a casa te sentí de nuevo, porque estás conmigo siempre, dentro, dentro, y en silencio grito ¡te quiero!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sentido, emotivo, con todo su amor. Intimo. Mi oración por todos. Allí solo restos. Recuerdos. Ellos están en el Cielo.

Anónimo dijo...

Mientras recordemos a nuestros seres queridos con cariño, aunque ellos falten de nuestro lado seguirán estando vivos.