domingo, 18 de marzo de 2012

Baños de la Encina en una tarde de oración, rogativa por la lluvia


 En la tarde del sábado 17 de marzo, a las 5 de la tarde los fieles de la Parroquia de San Mateo nos reunimos ante la ermita de Jesús del Camino. 

Este Cristo crucificado es desde siempre compañero de camino de los jornaleros de esta villa. El saludo y el descubrirse la cabeza los hombres y santiguarse al paso por esta pequeña ermita muestra como todos pedimos su protección en nuestro caminar diario. 

Nos reunimos rogando que la lluvia empape nuestras tierras también  nuestro corazón.

 Seguidamente procesionaremos la CRUZ Y EL CRITO DEL CAMINO hasta el Santuario de la Virgen de la Encina donde se celebrará la Santa Misa
 Bendice Señor nuestros campos
 Caminamos hacia el Santuario
 La cruz, símbolo del cristiano

 Con todo el respeto se hace estas fotos para compartir estas imágenes
 Impresionante siempre este trayecto
 La unidad

 La hermana Maravilla  nos guía en el Santo Rosario
 PIDE Y SE TE DARÁ


 Llegada al Santuario



 Comienza la celebración de la Eucaristía nuestro párroco D. Manuel Casado Huertas
 Todos en una misma oración
 Mis sensaciones han sido de paz y gratitud por esa tarde tan agradable
 Después conpartimos la merienda

 D.  Manuel nos deja este recuerdo

 A las 19,3 comienza el Via Crucis

 En cada estación nuestra personal petición
 Ya anochecido era todo luz en medio de la oscuridad
 En cada lectura un poquito de nosotros mismo
 Ayúdanos a caminar
 Jesús luz del mundo
 Los jóvenes están presentes
 La vida es el camino

 Ya de vuelta a la ermita de Jesús del Camino
 Fieles a Cristo
 Llenos de esperanza
 De proyectos
 Cristo del Camino escúchanos
 Dios Padre providente y generoso, que 'cuidas la tierra y la riegas' y
'cuyos canales están llenos de agua', concedenos la lluvia que tanto esperamos:
la lluvia que nuestros campos necesitan y que nuestros animales aguardan.
Que el agua llegue a nosotros como una bendición del cielo.
Te lo pedimos, por la intercesión de Jesucristo, Nuestro Señor.
Amén

 Para que no falte el pan de cada día
envíanos Señor la bendición de la lluvia.
¡Señor! envía desde el cielo la lluvia sobre
nuestros campos para fecundarlos y sobre
nuestras ciudades para calmar nuestra sed y
remediar las múltiples necesidades; te lo pedimos,
Padre amoroso, por nuestro Señor Jesucristo
tu Hijo... Amén.
 Después nos despedimos con un besapié
 Quede esta rogativa y esta entrada para todos los que no pudisteis estar fisicamente

Cristo queda en su ermita para amparo de cuantos le imploran al pasar junto a Él.

Qué así sea

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por esos ojos que son de todos y para todos